Pese a que el encuentro duró dos horas, la cumbre del gabinete 3.0 no dejó medidas para anunciar. «Falta saber más del plan macro y a largo plazo que pretende Javier Milei», aseguraron a INFOCIELO desde Casa de Gobierno. Tampoco hay mayores precisiones sobre el presupuesto 2024 que, se espera, el Gobernador envíe a la Legislatura en los próximos días. Es que el mandatario provincial aguarda el detalle de las definiciones nacionales antes de aventurarse a negociar con los intendentes la Ley de Leyes, como así también a cerrar las posibles reformas impositivas.
«No hubo precisiones todavía si se va a prorrogar el presupuesto del año pasado, como ha trascendido», afirmó Kicillof en conferencia de prensa. Tampoco se conoce el alcance de los recortes a los aportes del tesoro nacional (ATN) a las provincias, ni las posibles reformas a impuestos coparticipables. Pese a que el mandatario provincial mantiene el diálogo con Guillermo Francos, el Ministro del Interior no pudo facilitar la letra chica del programa económico mileísta.
Por eso los primeros pedidos de Kicillof a sus ministros para su «segundo tiempo» tienen que ver más con el trabajo en los barrios, donde impactarán de lleno las medidas económicas que tome el Gobierno Nacional. Aunque hizo gala de «equipo que gana no se toca», para los cambios obligados sumó al gabinete a dirigentes «cercanos» a los vecinos. Es el caso de Gabriel Katopodis, quien reemplazó a Leonardo Nardini en Infraestructura y Obras Públicas. O el puesto honorario que le otorgó a Sergio Berni, quien dejó a uno de sus dirigentes de confianza al frente del Ministerio de Seguridad.
«Kato» fue uno de los funcionarios más elogiados del Frente de Todos, y durante la campaña destacó por su militancia en estaciones y vagones de trenes. No sólo eso, tras la derrota en el balotaje se mostró militante, vagón por vagón. La misma premisa busca el Gobernador para el resto de sus funcionarios.
Ponerle la cara al ajuste de Nación, que indefectiblemente repercutirá también en la Provincia, no será tarea fácil. Según pudo saber éste medio, hubo ministros que hicieron saber su malestar por ese rol: entienden que no serán mariscales, como pretendían, sino que les tocará estar en la primera línea de fuego.
Fuente: infocielo