“Es un partido largo”, repitió el ministro de Economía, Sergio Massa, a su entorno desde el día en que se convirtió en el candidato presidencial de la unidad de Unión por la Patria. Trazó desde entonces tres etapas para la campaña y, con dos ya cumplidas -la primera dispersa, la segunda con el aparato ordenado y convertida en un contundente triunfo- arranca la “fase 3” donde disputará electores sólo con el segundo más votado, el candidato de La Libertad Avanza, Javier Milei, en el balotaje. Metódico, el que ganó las generales con casi el 37% de los votos, ya arrancó a planear las siguientes cuatro semanas: “acordar, sumar y salir de nuevo a la cancha a buscar voto por voto”.
En el comando de la campaña de Massa están convencidos de que “moverse por instinto y no por las encuestas” ha sido la clave del triunfo con una mejora de casi 10 puntos respecto de las PASO. “Los votos están en la calle, no en las encuestas”, insistieron a cronica.com.ar esta tarde. La frase recorrió ayer los pasillos del búnker de Chacarita donde la dirigencia de Unión por la Patria esperó los resultados. Es algo que Massa les inculcó en los últimos meses: “la campaña no ´te lleva´, nosotros, con propuestas claras, con medidas y con humildad salimos a contar qué país queremos”.
El mensaje llegó hacia adentro de la dirigencia de Unión por la Patria que se mueve cerca del candidato cotidianamente, también a los jefes provinciales y municipales. El oficialismo ganó en 13 provincias, lo que significó revertir el resultado de las primarias en ocho. Especialmente en el norte del país y en la Patagonia. Massa agradeció este domingo “la confianza” otorgada y prometió no fallarles. Sabe que muchos de los que lo votaron “están sufriendo”, según afirmó.
“Ahora volvemos a caminar estos días con mucha humildad y devolviendo el voto de confianza con laburo, decisiones concretas y medidas claras”, contó el mismo domingo uno de los funcionarios nacionales más comprometidos con la campaña callejera en el búnker donde se esperaron los resultados.
Para los próximos 30 días, con un debate presidencial de por medio con Milei -el domingo 12 de noviembre-, Massa abordará la tercera etapa de su largo partido: marcar su idea de “construcción versus la destrucción” que propone su contrincante libertario sin matices. El eje de su planteo será “cuidar a las familias”.
En el Congreso, a su vez, volverá a la batalla por exponer a la oposición al darle otro envión al debate sobre el Presupuesto 2024 y la separata que incluye beneficios impositivos a diversos sectores.
Los que responden al llamado de Sergio Massa de «unidad nacional»

Otro plano de la estrategia massista apunta a la amplia convocatoria de toda la dirigencia política a unir esfuerzos por el futuro del país. Así lo postuló Massa el domingo electoral durante su discurso en el búnker del Complejo C y así marcó que “la grieta ha muerto”. La frase derivó en un estruendoso aplauso de la militancia presente. La escena del candidato solo en el escenario le selló el traje de jefe en el cuerpo. Con los resultados en las urnas, hay un nuevo conductor del peronismo, uno que se ilusiona con “un gobierno de unidad nacional”.
De hecho, esta tarde en el Ministerio de Economía durante una conferencia de prensa con medios extranjeros adelantó: «Me parece un error plantear que la etapa que viene sea vinculada solo al peronismo. Vamos a un gobierno de unidad nacional. Yo voy a convocar a los mejores de las distintas fuerzas políticas, sin importar su procedencia, porque creo que tenemos que construir políticas de Estado. Mi gobierno va a tener sectores del mundo del trabajo y sectores del mundo empresario y sectores de la política de diverso origen partidario«.
Mientras en las redes sociales se bromea con los “abrazos de oso” al radicalismo de Juntos por el Cambio, a la izquierda y al peronismo disidente cordobés, Massa ya tiende hace rato puentes sobre los que espera edificar la diversidad dirigencial encolumnada detrás de su figura. El llamado no deja afuera tampoco a miembros del PRO. En la vereda de enfrente: Milei.
“Sabemos que Massa no es lo mismo que Milei”, dijo esta tarde Myriam Bregman, la candidata de la izquierda que ayer alcanzó el 2,7% de los votos. Hubo también expresiones desde el radicalismo que entusiasmaron a las filas massistas. Aunque no fue un apoyo explícito, el ex diputado radical y ex intendente de la Ciudad de Buenos Aires, Facundo Suárez Lastra, subrayó a través de las redes sociales: «No cuenten conmigo para votar a Milei». «Como dijo (el expresidente radical) Hipólito Yrigoyen, hay que empezar de nuevo. Lo que supere al populismo deberá ser liberal progresista y socialdemócrata», sostuvo el dirigente.
Quienes ya habían anticipado su respaldo en caso de balotaje, dieron más señales en ese sentido. Los diputados del Interbloque Federal Alejandro ‘Topo’ Rodríguez y Natalia de la Sota -que votaron al cordobés Juan Schiarettti en las generales (7% obtuvo)- celebraron este lunes el llamado de Massa a conformar un gobierno de «unidad nacional».
Hablando de cierre de grietas, a Massa lo recibieron este mediodía en el Ministerio de Economía los trabajadores afiliados tanto a UPCN como a ATE.
Por F.G.
Fuente: Crónica